Historia Teguise

Con anterioridad a la conquista de la isla por los europeos, el entorno de la villa conocido como la "Gran Aldea de Acatife", era uno de los principales núcleos de población maja. Otro de los asentamientos de población aborigen más importantes en Lanzarote fue Zonzamas, principal yacimiento arqueológico de la isla, que se encuentra en el ámbito territorial de este municipio.

Tras la conquista normanda, el sobrino de Jean de Bethencourt, Maciot, heredero del señorío de Canarias, fundó Teguise, tercera urbe colonial de Canarias después de San Marcial del Rubicón, al sur de Lanzarote, y Betancuria, en Fuerteventura.

Teguise se convirtió en la capital de la Isla aprovechando su emplazamiento geográfico central que la procuraba resguardo de las frecuentes incursiones de piratas, que aun así sacudieron a la población en varias ocasiones. La montaña de Guanapay sirvió como atalaya de vigilancia al divisarse desde ella la práctica totalidad de las costas de la isla.

Allí se construyó una fortaleza defensiva, el Castillo de Santa Bárbara, convertido en el Siglo XX en sede del Museo del Emigrante Canario y posteriormente en Museo de la Piratería. Teguise creció desde mediados del Siglo XVI constituyéndose un importante entramado urbano que se ha conservado.