Monumentos Santiago de Compostela

Catedral

La construcción de la actual catedral se inició en 1075 bajo el reinado de Alfonso VI y el patrocinio del obispo Diego Peláez. Fue construida según el mismo plano que la iglesia de ladrillo monástica de San Sernín de Toulouse, probablemente el mayor edificio románico de Francia. El templo fue construido fundamentalmente en granito. La construcción se detuvo en distintas ocasiones y, según el Liber Sancti Iacobi, la última piedra fue colocada en 1122 y la catedral fue consagrada en 1128. Según el Codex Calixtinus, los arquitectos fueron «Bernardo el viejo, un maestro maravilloso», su ayudante Galperinus Robertus y, más tarde, posiblemente «Esteban, maestro de catedrales».

Plaza de Platerías

Está delimitada por la catedral y el claustro en dos de sus lados. Enfrentada a la catedral está la Casa del Cabildo y en el centro de la plaza destaca la fuente barroca denominada Fuente de los Caballos.


Palacio de Rajoy

El Palacio de Rajoy es un edificio del siglo XVIII, que forma el cuarto lado que delimita el parvis del Obradoiro. Realmente se trata de una operación de rifascimento sobre varios volúmenes ya existentes cuya disposición no se ajustaba a la ordenación axial simétrica de la plaza presidida por la Catedral. La obra fue mandada hacer por el arzobispo Bartolomé de Rajoy al arquitecto Carlos Lemaur bajo los cánones neoclásicos para varias funciones; Seminario de Confesores (eran los que atendían a los peregrinos en la catedral, y además eran lenguajeros porque hablaban varios idiomas), para residencia de los Niños del Coro de la Catedral, para Casa Consistorial, para cárcel.

Hostal de los Reyes Católicos

Originalmente fue Hospital que se construyó como consecuencia de la visita realizada por los Reyes Católicos a Santiago en 1486, para atender a los peregrinos que por la época recorrían el Camino de Santiago. Con el tiempo, los Reyes Católicos ordenaron la construcción de una gran hospedería con la ayuda de las rentas recibidas en la victoria de Granada. Las obras duraron 10 años y los Papas ofrecieron indulgencias a cuantos cooperasen. Es de estilo renacentista plateresco.